Los residuos ocupan mucho espacio, dañan el entorno y luego se convierten en escombros. Un estudio comparativo de los distintos métodos de eliminación de residuos muestra que no existe una tecnología alternativa al tratamiento térmico de los residuos. Esto se debe a que el tratamiento térmico de los residuos permite una acumulación segura, especialmente cuando los residuos se acumulan durante un período prolongado, sin causar daños al medio ambiente. La incineración es el único método que garantiza la mineralización y estabilización de los residuos, la división y concentración de los contaminantes y una reducción sustancial.
Los refractarios de carburo de silicio se utilizan a menudo en incineradores de residuos domésticos debido a sus favorables propiedades. Esta aplicación se basa en las características especiales de este material y sus propiedades termodinámicas de resistencia a la erosión y a la abrasión. También es muy resistente a la abrasión a altas temperaturas. Generalmente se utilizan ladrillos de carburo de silicio aglutinados con silicatos o nitruros. Los ladrillos con alto contenido de alúmina y los moldeables refractarios se utilizan principalmente en áreas de baja tensión.